Raymond Ayala Rodríguez, conocido artísticamente como Daddy Yankee, continúa siendo el centro de atención luego de su conversión al cristianismo, la cual hizo pública hace más de un año.
La decisión del artista de adoptar un nuevo estilo de vida ha generado un sinfín de reacciones, mientras enfrenta una complicada situación personal y legal.
Problemas de fondo
Recientemente, el cantante habló abiertamente durante un culto religioso sobre los conflictos que atraviesa en su vida familiar. En sus declaraciones, reveló que, además de su crisis matrimonial con Mireddys González, su relación con sus padres y hermanos también se encontraba deteriorada.
"Tenía problemas con mis padres, con mis hermanos, no teníamos una relación sana, el matrimonio en caos", compartió. A pesar de la aparente perfección en su vida pública, el artista destacó que, a pesar de "tenerlo todo", sentía que le faltaba lo más importante: "Jesucristo en mi corazón".
Asimismo, Daddy Yankee también reflexionó sobre las trágicas historias de artistas que, aunque alcanzaron la fama y el éxito, perdieron la vida por sobredosis o suicidio. "Cuando yo estaba en un hotel a oscuras, solo, supuestamente teniéndolo todo, había perdido lo más importante, una comunión con Jesús", comentó, con énfasis en cómo la fama no fue suficiente para llenar el vacío que sentía en su vida.
Proceso judicial
A tal punto fue el impacto que, el conflicto matrimonial de Ayala alcanzó un nuevo nivel el pasado 2 de diciembre, cuando anunció su separación después de 29 años de matrimonio.
Finalmente, la situación se complicó aún más cuando el 14 de diciembre, el artista presentó demandas ante el Tribunal de Primera Instancia, acusando a su esposa y su cuñada, Ayeicha González, de realizar transferencias no autorizadas por $100 millones desde las cuentas de sus empresas, El Cartel Records y Los Cangris, a cuentas personales.
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