El gobierno de Holanda ordenó el martes el cierre de las escuelas primarias una semana antes para las vacaciones de Navidad.
Mientras las autoridades buscan contener un repunte en los casos de coronavirus mientras se propaga la nueva variante ómicron.
El primer ministro interino, Mark Rutte, también extendió otras restricciones vigentes hasta el 14 de enero; diciendo que el gobierno debe estar alerta ante la nueva variante del virus.
"Por supuesto, esa no es la buena noticia que se espera para la época navideña", dijo Rutte en una conferencia de prensa televisada a nivel nacional. "Así que sí, es una sorpresa decepcionante, pero quizás no muy grande".
Rutte dijo que las vacaciones escolares se extenderán de dos semanas a tres a partir del 20 de diciembre. Los niños más pequeños han registrado los aumentos más pronunciados en las infecciones de COVID-19 en el país.
Como parte de las restricciones, los bares, restaurantes y otros lugares de reunión, como teatros y cines, han cerrado sus puertas a las 5 de la tarde desde el 28 de noviembre y ahora tendrán que continuar durante la temporada navideña.
Rutte dijo que la presión sobre el sistema de salud combinado con la amenaza de la variante ómicron hizo que las medidas fueran inevitables.
“Todavía no sabemos mucho al respecto, pero esta nueva variante se está extendiendo considerablemente más rápido que la variante delta actual”, dijo.
El ministro de Salud, Hugo de Jonge, informó que la campaña de vacunas de refuerzo se acelerará para que todos los adultos que quieran puedan recibirla en la segunda quincena de enero.
Con información de AP.
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