La venta de pirotecnia es una actividad que, aunque festiva, conlleva riesgos significativos si no se maneja adecuadamente. Por ello, es fundamental que los puestos de venta cumplan con normas mínimas de seguridad para proteger tanto a los empleados como a los consumidores.
Cuando llega diciembre, a los niños les gusta jugar con fuegos artificiales y otro tipo de pirotecnia, por eso se suelen ver puestos que expenden estos dispositivos.
No obstante, su venta no es tan fácil como se ve, debido a que es legal siempre y cuando se sigan las reglas y leyes ya establecidas.
En 2011, las autoridades publicaron la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela N° 39.818 en la cual se emitió una resolución para Regular la Seguridad en la Comercialización al Detal, Almacenamiento, Transporte, y uso de los Artificios Pirotécnicos.
Esta resolución destaca todos los puntos importantes en cuanto la venta de pirotecnia.
Diversos organismos están encargados de hacer cumplir la Resolución, como la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), Policía Nacional Bolivariana (PNB) y los organismos de seguridad municipales.
¿Cuáles son las normas mínimas de seguridad para vender pirotecnia?
El artículo 23 de la resolución publicada en diciembre de 2011 indica que los locales deben de aprobar una evaluación del Cuerpo de Bomberos de la entidad y obtener la autorización de la Dirección General de Armas y Explosivos.
Además, se establece que los puestos de venta mantengan un ambiente libre de fuentes de ignición. Esto incluye: prohibición de llamas abiertas, es decir, no se permite el uso de encendedores, fósforos o cualquier objeto que produzca fuego dentro del área de venta.
Por otro lado, deben cumplir con la Norma COVENIN 200 para garantizar que las instalaciones eléctricas sean seguras y no representen un riesgo de incendio.
El personal del establecimiento deben colocar avisos visibles que indiquen "Prohibido Fumar" y cualquier instrucción de seguridad sobre cómo manejar los productos de manera segura.
Otro punto a destacar es la forma en que se exhiben los fuegos artificiales, ya que no se debe exhibir más de tres ejemplares de cada tipo de producto para evitar el exceso de inventario en el área de venta.
Las estanterías deben estar alejadas de las entradas y salidas para evitar accidentes y facilitar la evacuación en caso de emergencia.
Asimismo, es imprescindible contar con un plan de emergencia en caso de incidentes, como un plan claro que indique las rutas de evacuación y los procedimientos a seguir en caso de un accidente.
Igualmente, se deben tener extintores adecuados y accesibles en el lugar, con personal capacitado para su uso.
Mientras que para reducir el riesgo de accidentes, las instalaciones de venta deben cumplir con distancias de seguridad y no se deben ubicar a menos de 500 metros de estaciones de servicio, tanques de almacenamiento de líquidos combustibles, o centros asistenciales y educativos.
Si las autoridades inspeccionan los locales de venta de pirotecnia y no cumplen con los requerimientos o violan lo establecido en alguno de los artículos, pueden decomisar la mercancía.
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