Una profesional de la salud mental, identificado como Mackenzie Rose Colgan, es acusada por el asesinato de su bebé en Maryland, EEUU, en lo que las autoridades consideran un intento de homicidio-suicidio contra su familia.
La mujer, enfrenta un cargo de asesinato en primer grado por la muerte de su bebé, de tan solo tres meses, ocurrida el pasado 8 de diciembre, según indicó mediante un comunicado oficial el Departamento de Policía del Condado de Montgomery.
Alrededor del mediodía en que la bebé murió, Rose contactó a los servicios de emergencia para informarles que había ahogado a su hija mientras la bañaba.
Cuando los agentes llegaron a la vivienda en Chevy Chase, Maryland, encontraron a la bebé aún con signos vitales. La trasladaron a un hospital cercano, donde el personal de emergencias confirmó el fallecimiento.
De acuerdo con documentos judiciales y reportes de investigadores citados por NBC 4, The Washington Post y FOX 5 DC, Rose confesó haber despertado ese día con la intención de “terminar con todo” y matar a sus dos hijos y a su esposo, incluso a ella misma.
Rose dijo a sus familiares que estaba bañando a su bebé antes de ahogarla, que llenó la bañera principal con agua y colocó una bañera más pequeña dentro, donde puso a su hija, según narran los documentos judiciales.
En los mismos documentos, Colgan admitió haber volteado la cabeza de la niña hacia un lado para no verla mientras se ahogaba.
Tras el terrible hecho, pensó en saltar por la ventana, pero en vez de eso, confesó a su esposo lo sucedido, quien corrió al baño para realizarle maniobras de resucitación y le pidió a Rose llamar al 911.
Rose se desempeñaba como consejera clínica profesional con licencia; trabajaba con niños y familias, según lo dicho por una terapeuta que la conocía, pero en el momento en que ocurrió el incidente se encontraba desempleada.
La policía intervino dos veces en su residencia en los últimos meses. En julio fue solicitada una verificación de bienestar, y en octubre la propia Rose llamó al 911 para reportar que su bebé no respiraba.
Cuando llegó la policía, ella afirmó, en ambas ocasiones, que todo estaba en orden.
Colgan fue arrestada en el lugar de los hechos; se encuentra detenida sin derecho a fianza en la cárcel del condado de Montgomery acusada de asesinato en primer grado, en espera de una evaluación de salud mental antes de su audiencia judicial.
Con información de La Opinión
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