Estados Unidos celebra sus nuevos comicios y, aunque usted no lo crea, hay una afluyente participación latina para este 2024.
La página AS/COA asevera que al menos 36 millones de latinos están habilitados para ejercer su derecho al sufragio, lo que vendría representando al 15% de los votantes elegibles.
“Los latinos, un grupo demográfico diverso con la segunda tasa de crecimiento más rápida entre los bloques de votantes, pueden resultar cruciales para decidir las contiendas presidenciales y legislativas en varios estados”, se lee en la página.
De igual forma, AS/COA apunta que la participación latina es más latente en regiones como California, Florida y Texas, tras ser las locaciones con mayor índice de suramericanos. “Así como en estados clave como Arizona y Nevada”, agrega el portal.
Alrededor del 31% de los latinos que participarán en estos comicios electorales, tienen entre 18 y 29 años.
“Una encuesta de noviembre de 2023, proyectó que el 22 % de los latinos votarían por primera vez. En general, el tamaño del electorado ha crecido un 153 % desde las elecciones de 2000”, sostiene la fuente digital.
Según una encuesta realizada por Pew Research Center en el marco de la última campaña presidencial (entre agosto y septiembre), el 57% de los latinos que están registrados en el sistema electoral tienen previsto votar por Kamala Harris, mientras que el otro 39% le dará el voto a Donald Trump y un 4% todavía no se ha definido en el candidato de su preferencia.
Requisitos para los comicios
Es importante señalar que solo los estadounidenses, de nacimiento o nacionalizados, pueden participar en los comicios.
Si usted es latino y todavía no obtiene la ciudadanía, debe abstenerse de acudir a los centros electorales o de inscribirse en el sistema electoral.
“Es considerado un crimen, si usted no es ciudadano estadounidense y se inscribe para votar, o de hecho vota en las elecciones federales”, se lee en la página del gobierno americano.
El saltarse los trámites de ciudadanía podría llevar a otras consecuencias.
“El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) podría negar la ciudadanía (naturalización) o deportar a las personas que voten o se registren para votar y que no son ciudadanas de Estados Unidos”, destaca la web.
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