El recién electo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, comenzó a cumplir con parte de las promesas que hiciera durante la campaña presidencial, al ordenar el cierre del departamento de Educación de Estados Unidos.
La oficina, que funge como un ministerio, de corte federal y que funciona en la ciudad de Washington, será cerrada por completo,
las funciones sobre la educación del pueblo estadounidense, pasará a ser responsabilidad de los estados, anunció este lunes el mandatario republicano.
"Una de las cosas que haré al principio del mandato será cerrar el departamento de Educación en Washington y enviar todo el trabajo del sistema educativo a los estados. Queremos que ellos se dediquen a la educación de nuestros hijos, porque harán un trabajo mucho mejor. Gastamos el triple por alumno que cualquier otra nación, pero, aun así, estamos al fondo de la lista. No podríamos hacerlo peor. Terminaremos con el sistema de Educación desde Washington, cerraremos todos los edificios, donde incluso hay gente que odia a nuestros hijos, y enviaremos todo el sistema a los estados", dijo Trump y reseñó el medio Panam Post.
Vale destacar que ya algunas gobernaciones de los estados, sobre todos los que están bajo el mando demócrata, hicieron fuertes aseveraciones en torno a la decisión del que será el nuevo inquilino de la Casa Blanca.
Mientras que sus seguidores y partidarios, como el magnate de las telecomunicaciones, Elon Musk, aplaudieron la decisión y la calificaron como una solución a la problemática de la educación en EEUU.