Un centro de detención para inmigrantes en Nueva Jersey está generando una gran controversia debido a diversas irregularidades.
Esta acción se enmarca como parte de las políticas antiinmigrantes impulsadas por la administración de Donald Trump.
Según informó Telemundo Noticias, la cárcel de Delaney Hall en Newark, es objeto de protestas por parte de activistas que cuestionan su funcionamiento, especialmente debido a la falta de pruebas de aprobación por parte de las autoridades locales.
Preocupación local
Desde que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) decidió utilizar este lugar para la detención de migrantes, el alcalde de Newark, Ras Baraka, ha expresado su preocupación.
Baraka señala que no se están cumpliendo las normas y licencias necesarias. A pesar de estas advertencias, el centro comenzó a operar como centro de detención de inmigrantes.
La situación salió a la luz cuando una mujer denunció que su esposo había sido arrestado y llevado allí. Esto llevó al alcalde a intentar visitar el centro para verificar las condiciones de los detenidos, pero se le negó el acceso.
Manifestaciones y acciones legales
Fuera del centro, los manifestantes se han congregado en contra de las políticas de inmigración del gobierno federal.
Mientras tanto, el gobierno local ha emitido tres citaciones contra la administración del penal, que está bajo la jurisdicción del condado de Essex.
Una de estas citaciones se debe a la negativa a permitir la entrada del alcalde, y las otras dos están relacionadas con la falta de licencias y pruebas para operar como centro de detención de inmigrantes.
Además, durante la visita del alcalde, el personal del Departamento de Sanidad tampoco pudo ingresar para evaluar las condiciones de los migrantes detenidos.
La controversia persiste a medida que continúan las redadas del ICE contra los inmigrantes indocumentados.
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