Durante el fin de semana largo por el feriado de Acción de Gracias, Estados Unidos se prepara para recibir un número récord de pasajeros que viajarán por el país.
La Administración de Seguridad de Transporte (TSA) anticipa un aumento significativo en el movimiento en los aeropuertos. También emitió un recordatorio sobre las normas de seguridad que ayudarán a agilizar el proceso de registro y embarque.
La TSA informó que los pasajeros pueden llevar alimentos sólidos, como pavo y relleno, en su equipaje, pero deben prestar atención a las regulaciones sobre líquidos.
¿Qué está permitido?
Se permite una bolsa de un cuarto de galón (aproximadamente un litro) con líquidos, geles, aerosoles, cremas y pastas en el equipaje de mano, siempre que cada envase no supere las 3.4 onzas (100 mililitros).
Para facilitar la inspección, es recomendable colocar estos artículos en la bolsa y separarlos del resto del equipaje.
Cualquier líquido que supere el límite establecido debe ser facturado. Además, si un artículo genera una alerta durante la inspección, será sometido a una revisión adicional.
Un representante de la TSA enfatizó que cualquier sustancia que pueda derramarse o rociarse debe ir en el equipaje facturado, y la norma 3-1-1 sobre líquidos se aplicará de manera estricta.
Índices
Se estima que entre el 26 de noviembre y el 2 de diciembre, la TSA inspeccionará a aproximadamente 18.3 millones de pasajeros, lo que representa un aumento del 6% en comparación con el año anterior.
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Esta temporada festiva es conocida por la variedad de situaciones que enfrentan los agentes de seguridad, aunque el cruce de alimentos suele ser predecible.
Con información de Mundo Deportivo.
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