A fin de brindar asesoría y asistencia a la comunidad nicaragüense que reside en la imponente e intrigante ciudad de Nueva York, existen organizaciones que brindan las herramientas necesarias para acoplarse a esta nueva fase de adaptación.
La primera es la organización Dos Pueblos, que justamente va de fortalecer el intercambio cultural y social entre las ciudades de Nueva York y Tipitapa (municipio nicaragüense).
“Es una organización sin fines de lucro que trabaja en colaboración con la gente de Nicaragua para mejorar el desarrollo comunitario a través de proyectos de educación, nutrición, promoción de la salud, intercambios interculturales, educativos, salud ambiental y derechos humanos”, se lee en su web.
Esta relación entre ambas comunidades, busca “avanzar hacia una globalización basada en el respeto, la comprensión y la diversidad de perspectivas”.
Otra alternativa es el Consulado General de Nicaragua en Nueva York, cuyo propósito es legalizar la estadía o residencia de estos inmigrantes.
“Tenemos servicios de visados para no inmigrantes, inmigrantes y visas de turismo. Las personas nacionales pueden solicitar pasaportes, documentos legales y asistencia de emergencia”, se lee en la página del consulado.
Los inmigrantes pueden llamar al: (+1-212)983-1981 y está ubicado en la segunda avenida de la ciudad.
Más referencias
Otra de las organizaciones que puede conectar a la comunidad nicaragüense con sus raíces, es el Comité Cívico Cultural de Nicaragua, cuyo punto de encuentro es en la Iglesia de Nuestra Señora de Lourdes y el número de contacto es 212-862-4380.
“Se busca la unificación de la comunidad nicaragüense que reside en New York. Se trata de mantener las tradiciones nicaragüenses tanto cívicas como religiosas. Las reuniones son una vez al mes y en caso de emergencias se llama a reuniones extraordinarias”, se lee en la página de la iglesia.
Vale mencionar que también existe la Fundación Nicaragüense Americana para el Desarrollo Educación y Cultura (Funadec), con la diferencia de que está radicada en Houston.
“Iniciada en 1986 por la primera diáspora nicaragüense de Houston. La Fundación fue creada para que nuestros hijos pudieran aprender los valores de la cultura nicaragüense en los Estados Unidos. Logramos obras de caridad y actividades educativas”, destaca su perfil de Facebook.
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