Diamantes, rubíes, perlas, esmeraldas… la lista de piedras preciosas es extensa y no hay ninguna casa real que no ostente unas tiaras entre sus riquezas. Ciertamente, esta es la joya que más distingue a los de sangre azul: las usan en bodas, eventos reales y todas gozan de una historia interesante.
El portal británico money.co.uk se encarga de comparar precios en diversas áreas. Allí podrás saber qué Familia Real tiene en su poder el modelo más exclusivo de tiaras. Ellos recurrieron a la ayuda los joyeros de Steven Stone, expertos en diamantes para realizar una investigación. En ella analizaron ocho familias reales de Europa y las tiaras que han usado en las últimas tres bodas de este siglo.
Los expertos calcularon la cantidad de gastos que invierte la realeza en cuidar estas joyas. Y tuvieron en cuenta el material empleado, el costo de fabricación de cada pieza y la edad de su propietario. Los resultados arrojaron que la familia real de Holanda y la de Gran Bretaña tienen las colecciones más costosas. Ambas comparten el primer puesto gracias a sus colecciones de diademas estimadas en 19 millones de euros cada una.
Tiaras reales
Ingleses al poder
El repertorio de la reina Isabel II cuenta con las tiaras usadas por las tres últimas novias que pasaron por el altar de Windsor. La tiara Fringe de la reina María que usó la princesa Beatriz; la tiara Greville Emerald Kokoshnik, usada por la princesa Eugenia en su gran día. Y la tiara Bandeau de la reina María, usada por Meghan Markle en su matrimonio con el príncipe Harry. Las dos primeras piezas fueron parte de la herencia paterna de las princesas Beatriz y Eugenia, y pertenecían, como su nombre lo indica, a la reina María.
Reyes del maximalismo
Los reyes de los Países Bajos ostentan una fama maximalista que no han perdido jamás. En las tres últimas bodas de esta familia hemos podido ver la tiara de Estrellas usada por la reina Máxima. Así mismo, la tiara Württemberg de la reina Beatriz y la tiara Rose Cut Diamond Bandeau, perteneciente a la reina Juliana.
Reyes del norte
La Casa Real de Noruega figura en el tercer lugar gracias a una colección cuyo valor ronda los 18 millones de euros. Su modelo más costoso es la tiara de diamantes usada por la reina Maud durante su boda con Haakon VII en 1896. Cuyo valor ronda los 12 millones de euros. Años más tarde, la joya fue usada por la princesa Marta Luisa en su boda con el ya fallecido Ari Behn. Después, la princesa Mette-Marit la usó para la boda de la princesa Victoria de Suecia en el año 2010.
Empate real
Las familias de Dinamarca, Bélgica y España siguen a la noruega, mientras que la Casa Real Belga ocupa el quinto puesto. Esto gracias a un obsequio hecho por Franco a Fabiola de Mora y Aragón durante su boda con el rey Balduino de los belgas en 1960. Esta joya era un tocado con rubíes, aguamarinas y esmeraldas intercambiables que le fue entregado por Carmen Polo. Fabiola usó esta joya años más tarde en diferentes eventos y lo hizo en todas las formas que este diseño permitía: como diadema y como gargantilla.
La Cara Real de España está en el sexto lugar con un valor en joyas de 8.7 millones de euros. El modelo más valioso es la tiara que usó la infanta Elena en su boda con Jaime Marichalar en 1995, valorada en 3.000.000 de libras. La llamada tiara Marichalar es una joya de platino y diamantes que cuenta con un diseño helénico. Según cuentan, la familia Marichalar le obsequió a la familia real española durante la pedida de mano de la infanta. Hasta ahora, continúa siendo parte de la colección de la infanta Elena incluso después de su divorcio con Jaime Marichalar en 2009.
Este modelo fue usado por la hermana del rey Felipe VI durante la boda de Victoria de Suecia y en otras ocasiones, años más tarde.
El año pasado, la infanta le prestó este preciado tesoro a Inés y Blanca de Marichalar. Ambas hijas del conde de Ripalda, Amalio de Marichalar, para que las usaran en sus respectivas bodas.
Asimismo, entra en la lista la tiara de flor de Lis, obsequio de Alfonso XIII a la reina Victoria Eugenia en su boda en 1906. Esta es la segunda de más valor para los españoles, valorada en tres millones de euros. Esta joya fue llevada por primera vez por la reina Sofía en 1983 durante una visita de Estado a los reyes de Suecia. Y también la usó durante su despedida del trono español luego de 39 años siendo reina.
Más tarde, la reina Letizia la usó en una cena en 2017 donde invitaron al presidente argentino, Mauricio Mauri, y a su esposa, Juliana Awada. La joya está elaborada en platino y diamantes con charnelas que representan la flor lis heráldica de la familia Borbón, con motivos naturales de diamantes. Se considera la más emblemática de la Corona de España.
Tampoco podemos dejar por fuera a la tiara elegida por la reina Letizia el día de su boda. Se trató de la Prusiana, la tercera más valiosa de la Familia Real. Está hecha en platino, con diamantes y un brillante en forma de lágrima en la parte central de la tiara. Además, también fue usada también por Sofía de Grecia en su respectiva boda con el rey Juan Carlos en 1962. Este tesoro fue un regalo de Guillermo II de Prusia a su hija Victoria Luisa, para su boda con Ernesto Augusto III de Hannover. El diseño está inspirado en el arte helénico.
Por Isabel Da Cunha Ventura
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