En la cocina suelen quedar algunos espacios olvidados que se le pueden dar un nuevo uso con una buena restructuración o simplemente ajustando algunos detalles sin que le generen mucho gasto económico.
Normalmente las esquinas junto a las puertas o las ventanas son las más olvidadas, así como los huecos sobrantes. La mejor solución para estos sitios es utilizar muebles modulares superiores o inferiores en medidas estándar, e incluso los zócalos inferiores, que habitualmente se emplean para ocultar las patas, y que pueden reutilizarse también en forma inteligente disponiendo en ellos prácticos cajones con ruedas para su fácil traslado.
Aproveche los módulos de almacenaje de las esquinas en los fondos y no desperdicie ni un centímetro. Puede colocar en estos espacios módulos extraíbles tipo gavetas son súper prácticos para guardar los condimentos.
Es importante que los muebles que desea tener en la cocina estén hechos a la medida, para evitar esos huecos que estropean el diseño y suelen ser focos de suciedad. Piense en usar armarios tipo rincón, estos harán accesible hasta el espacio más recóndito. Los conjuntos terminados para instalar no suelen tener en cuenta estos detalles, pero en cocinas compradas por elementos, para montar uno mismo, todas estas recomendaciones son valiosas.
Con una buena estrategia de diseño se puede conseguir un doble objetivo; primero multiplicar los lugares de almacenamiento y segundo no dejar ningún espacio inutilizado. Si la cocina no es una pieza demasiado grande, como ocurre en la mayoría de las viviendas modernas, habrá que valorar doblemente estos recursos.
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