Los manteles cumplen la función de vestir y proteger la mesa del comedor, pero también son un elemento indispensable a la hora de decorar cualquier reunión o fiesta.
El mercado actualmente ofrece manteles fabricados en diferentes materiales, desde plástico, algodón, lino e incluso una combinación de estos.
Para mantener por más tiempo estas piezas y alargar su vida útil sin perder la calidad y sus colores, debe tener ciertos cuidados a la hora de lavarlos.
A la hora de lavar los manteles
La mantelería delicada se hace únicamente con jabones suaves preferiblemente en polvo, con agua fría o tibia. No debe lavarse en forma brusca.
Si el mantel tiene bordado debe lavarlo a mano y con agua fría, así evitará que se estropee.
La mantelería blanca que no tenga absolutamente nada de color se lava agregándole al agua un blanqueador suave.
Nunca lave estas piezas con agua calienta, ya que con el tiempo tienen a deformar la tela o estirarlas.
Suavizantes
Se pueden usar, pero no en exceso, lo ideal es rebajarlo con agua fría.
¿Se pueden planchar?
Los manteles se planchan en la forma más plana posible, dejando sólo un pliegue central que lo divida justo por la mitad.
Las manchas de cera y grasa
Debe limpiarlas con bencina. Las de fruta, té, café, casi siempre sale fácil extendiendo la parte manchada sobre la boca de un recipiente y dejando caer desde cierta altura un chorrito de agua hirviendo sobre la marcha para que la golpeé con fuerza.
Dónde guardar los manteles
El lugar dispuesto para guardar los manteles debe ser lo más amplio posible, seco, alejado del polvo y la humedad para evitar el olor ha guardado.
Los manteles blancos procuren colocarlo en una bolsa de tela para mantener el color blanco.
Para almidonar
Después de lavar la mantelería y cuando esté casi seca, se disuelven cucharadas de almidón en una taza de agua fría. Una vez disuelto el almidón se le agrega un litro y medio de agua, se revuelve y se dé reposar.
Después, se mete en todas las prendas; cuando estén bien impregnada se sacan, exprimiéndolas bien, y se ponen a secar. Debe plancharse estando todavía un poco húmeda su rociándolas bien con agua.
Cabe anotar que el espray para almidonar que se consiguen las tiendas sólo sirve para prendas pequeñas, ya que con este producto los manteles no adhieren la consistencia necesaria.
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