Las puertas de las duchas suele acumular suciedad, bacterias, gérmenes, etc., y es por ello que se debe mantener una limpieza y desinfección constante para así eliminar toda posibilidad de que se propaguen enfermedades.
Aunque no lo creas, las puertas deberían ser una de las partes más limpias de los baños y partiendo de ello te daremos algunas recomendaciones para que esta tarea se te haga un poco más sencilla.
Trucos para limpiar las puertas de las duchas
Las puertas de deben limpiar con regularidad porque de lo contrario acumularan suciedad que se nota a simple vista, pero también bacterias que pueden pasar desapercibidas y causar mucho daño.
Aunque se suele pensar que por estar en contacto constante con el agua están limpias, no es así, todo lo contrario, debido al agua, jabón y otros químicos que se van acumulando, se forman esos residuos de cal que hacen que la superficie se vea opaca y descuidada.
Acaba con la cal de la mampara
Independientemente del material con el que estén elaboradas las puertas, éstas deben limpiarse constantemente, lo ideal es que se laven a profundidad una vez a la semana.
El plástico se ensucia mucho más rápido que el cristal, por ende, es más fácil que se vean las manchas y los residuos en este tipo de superficie. Para limpiar la cal de una puerta de plástico y transparente, puedes recurrir al amoníaco en spray.
En caso de que sea de cristal opta por utilizar vinagre blanco. Por su composición química, el vinagre es el elemento ideal para limpiar el vidrio ya que no lo mancha ni lo maltrata. Solo debes diluir una taza de vinagre blanco en un poco de agua tibia y con un paño, limpiar la superficie de la puerta.
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Solución casera para acabar con la cal
1. Vinagre blanco y bicarbonato. Mezcla una taza de vinagre blanco con dos cucharadas de bicarbonato de sodio y aplica la pasta resultante sobre la puerta de la ducha, deja actuar 20 minutos y luego elimina los restos con un paño húmedo.
2. Vinagre blanco y agua. Mezcla dos partes de vinagre blanco y dos partes de agua caliente. Coloca la mezcla en un recipiente con atomizador y rocía toda la puerta, deja actuar 20 minutos y frota la superficie con una esponja o paño, concluye pasando un paño para quitar los residuos con un paño.
3. Bicarbonato, limón y vinagre. Mezcla tres partes de vinagre y una de agua, añade dos cucharadas de bicarbonato y el zumo de un limón. Coloca el preparado en un envase con atomizador y espárcelo por la superficie. Deja actuar 10 minutos y aclara con un poco de agua caliente, y finaliza secando la superficie con un paño limpio.
Recomendaciones
– Cada tres días rocía las puertas o mamparas y el carril con zumo de limón, así eliminarás las bacterias y evitarás que se produzca moho.
– Después de ducharte, deja la ventana o puerta abierta para que no se acumule la humedad dentro del baño.
– Cuando compres productos de limpieza, asegúrate que sean aptos para el tipo de mampara que tengas.
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2021-07-01
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