Las mantis son insectos que pertenecen a la familia de los Dictiopteros, se conocen que existen 2400 especies en el mundo. Pero seguramente la más famosa es la mantis religiosa.
Sin embargo, en el sudreste asiático se encuentra la Hymenopus coronatus o mejor conocida como la mantis orquídea, una especie sinigual que atrae las miradas de todo el que la mira.
Y es que este pequeño animal tiene la capacidad de mimetismo, al hacerse pasar por la flor de orquídea, se ha convertido en la reina del camuflaje.
Por lo que es fácil encontrarla escondida entre la flor de la orquídea o en los árboles de cambur florecidos. Como dato hay que aclarar que no son venenosas.
Características
Esta mantis suelen encontrarse en hermosos colores como blanco con detalles rosas, amarillos o completamente rosados. Sus patas tienen una forma muy parecida a los pétalos de flor.
La estructura de su cuerpo asemeja perfectamente a una flor y lo increíble es que esta especie puede cambiar de tono de color en cuestión de días dependiendo de la luz, la humedad o el entorno.
El tamaño de la hembra es mayor puede llegar a medir 7 cm en comparación con los del macho que son 2,5 cm.
Cuando son jóvenes tienen el cuerpo color negro y naranja. A medida que va creciendo su color cambia y se va adaptando al sitio que la rodea con las sucesivas mudas.
Cazadoras ágiles
Aprovecha su habilidad de mimetizarse para esperar pacientemente que caigan sus presas y devorarla. Suela atraer a los insectos polinizadores y a los grillos.
Pero, también le gusta cazar moscas, abejas sin aguijón, mariposas, polillas y si se atraviesa una lagartija también se la come.
Apareamiento
Son insectos solitarios, solo buscan pareja en la época de apareamiento. En el arte del amor es un poco peligroso ya que el macho mientra esta en el cortejo puede ser devorado.
Esto no sucede todo el tiempo, puede pasar que la hembra tenga hambre o que el macho la fastidie mucho.
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