La anemia es una enfermedad que no solo la padecen los seres humanos, los gatos también pueden presentarla. Se trata de una reducción de glóbulos rojos en el proceso de circulación. Estas células contienen hemoglobina, lo que las hace parte fundamental para el proceso respiratorio, así como también son las encargadas de aportarle su color rojo a la sangre.
Tanto en humanos como en gatos, esta enfermedad debilita a quien la padece debido a que se reduce considerablemente la habilidad de absorción de oxígeno, lo que debilita el organismo.
Además de la debilidad se pueden presentar otro tipo de síntomas. Aquí te nombramos alguno de los más importantes para que puedes detectarla a tiempo en tu mascota.
Anemia en los gatos
Como mencionamos anteriormente, si tu gato sufre de anemia presentará gran debilidad, pero este no es el único síntoma que puede presentar.
También presentará palidez, la cual podrás notar en la coloración de su nariz o cualquier membrana mucosa como boca y alrededor de los ojos.
La debilidad estará acompañada de letargia, por lo que tu gato jugará y se moverá menos de lo usual. Pero si lo hace, seguramente será por tiempos muy cortos, y al hacerlo quedará muy cansado y con problemas visibles de respiración.
Los problemas del corazón y la taquicardia presentes en tu gato pueden estar vinculados con la mala respiración. De igual forma, los felinos con anemia pueden comenzar a ingerir alimentos extraños como su arena, tierra o lamer el concreto.
Diagnóstico
El hecho de que tu gato presente problemas respiratorio no significa que padezca de anemia, por ello, lo recomendable es levar al gato a una revisión veterinaria. Será su médico, que con análisis y estudios, podrá determinar su verdadera condición y aplicar el tratamiento adecuado.
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