El desarrollo personal es importante, los estudios, el trabajo, son herramientas que te permiten tener una buena calidad de vida. Sin embargo es importante tener un tiempo para cultivar la parte espiritual.
La necesidad cultivar la espiritualidad, implica el desarrollo de la capacidad de tener una actitud de asombro ante la vida, que nos lleve a pensar personalmente y plantearnos preguntas que iluminen el discurrir de nuestra existencia diaria: ¿Por qué hay algo en lugar de nada? ¿De dónde venimos? ¿Hacia dónde caminamos? ¿Qué sentido tiene el hecho de existir?.
Esto solo es posible si te conectas con tu silencio interior. Entonces puedes pensar por cuenta propia, diferenciar el bien del mal, y descubrir una meta que unifique y guíe nuestras decisiones de cada día.
La espiritualidad se desarrolla cuando dedican tiempo a la oración, a examinar la vida, dedicar tiempo para leer un libro, es una manera de tener actitudes profundas y el porqué de las mismas. El ritmo de la vida actual aleja al individuo de la normalidad, llena de tensiones, quita la paz y te aparta de la espiritualidad.
¿Cómo cultivar la espiritualidad?
1 Ayudar sin esperar nada a cambio, es una manera de evolución.
2 Ser una buena persona, sin importar la religión que se tenga.
3 Meditar y realizar todo de manera consciente.
4 Elegir una manera de llevar una vida más saludable. Ejercicios y buena alimentación es un inicio.
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