En torno al Día Mundial del Corazón conversamos con una leyenda de la medicina venezolana. El doctor Alexis Bello es médico cirujano, egresado de la Universidad Central de Venezuela. Ha atendido a casi 10 mil pacientes en más de 40 años de carrera médica y ha realizado 8500 intervenciones quirúrgicas. También es un gran deportista y ha corrido diferentes maratones a nivel internacional.
1 - ¿Qué avances tecnológicos considera más significativos en torno a las cirugías cardiovasculares?
AB: Durante las últimas décadas, se han puesto en ejecución muchos avances significativos y de distintas índoles, para el tratamiento de lo que constituye la primera causa de mortalidad en la mayoría de los países: las enfermedades cardiovasculares. Específicamente en lo atinente al tratamiento quirúrgico, vale la pena destacar, nuevos procedimientos menos invasivos de distintas afecciones cardiovasculares. Como por ejemplo la cirugía mínimamente invasiva, la implantación endovascular de algunas prótesis, la protección del músculo cardíaco durante el tiempo necesario que requiere detenerlo para repararlo, la implementación de nuevos instrumentos quirúrgicos, los procedimientos actualizados para la compleja y necesaria anestesia de estos enfermos. Además, los adelantos en farmacología que permiten una mejor evolución de los procedimientos quirúrgicos, la mejoría de las prótesis, incluyendo los corazones artificiales y la infraestructura para los trasplantes cardíacos, entre otros.
2 - ¿Qué desafíos enfrenta la cardiología en la actualidad y cómo se pueden abordar?
AB: Igualmente son muchos y variados, tan solo a manera de ejemplos: el desarrollo del personal necesario para afrontar estos procedimientos, el financiamiento adecuado para afrontar lo excesivos costos que implica el tratamiento invasivo de muchas de las
enfermedades cardíacas, el entrenamiento posible de todo el personal involucrado, entre otros. Es necesario la educación y orientación de la población, para la prevención de estas enfermedades.
3- ¿Cómo ha sido dedicar su vida a la cardiología?
AB: Considero que el haber seleccionado esta especialidad sería como parafrasear lo señalado por el gran moralista Florencio Escardó. Representa básicamente una forma de vida más que simplemente una selección de un tipo de trabajo, o también parafraseando el recordado Fernando Risquez: la diaria necesidad de tener sangre en las manos tratando de ayudar al prójimo.
4- Ha “negociado con la muerte”, una metáfora sobre cómo ha dado segundas oportunidades de vida dentro del quirófano. ¿Cuál es su experiencia con pacientes que han superado enfermedades cardiovasculares?
AB: Ciertamente he acuñado esa expresión, ya que representa lo que he sentido a lo largo de la dedicación a esta forma de vivir. Creo que se trata de intentar casi que diariamente, negociar con la muerte para poder rescatar a tantos enfermos que lo han necesitado y poder devolverlos a una vida útil y productiva. Ello me ha permitido tener un extraordinario privilegio existencial, haber podido comprender mejor, la verdadera dimensión del ser humano.
5 - ¿Qué lo motivó a comenzar a correr maratones y cómo ha sido el poder combinar su profesión médica con esta pasión?
AB: Siempre, desde muy pequeño fui deportista, probablemente tuve la influencia de mi padre, quien fue un destacado periodista deportivo. El running lo incursioné muy tardíamente como parte de esa permanente inquietud. A mi medida tuve la oportunidad de participar en múltiples carreras, medio maratones y 16 maratones. Además, la necesidad de estar físicamente con una preparación física adecuada, requerida para la labor que me ha tocado desempeñar.
6- Ha sido un luchador social, actualmente ejerce como presidente de la Fundación Cardioamigos. ¿Cómo vive la experiencia?
AB: He tenido el gran privilegio con un grupo de amigos y colegas, de pertenecer a una organización, con cuyo esfuerzo hemos logrado colaborar con el costoso tratamiento que implica la cirugía cardiovascular. Ha sido un extraordinario esfuerzo de muchos años que
ha ayudado a muchos compatriotas a poder coloquialmente conocer una nueva navidad.
7- ¿Algún mensaje para nuestros lectores sobre cómo cuidar la salud del corazón y la importancia del ejercicio en el Día Mundial del corazón?
AB: Se trata de una pregunta que requeriría una respuesta excesivamente larga. Sin embargo, en un esfuerzo simple para ilustrar a los respetables lectores, se podría resumir en tratar de modificar los llamados factores de riesgos. Tanto modificables como aquellos que no pueden ser modificados. Existen algunos que no pueden alterarse como serian por ejemplo los inherentes a la raza, al sexo, a la edad, los de origen genéticos etc. Los que se pueden modificar y/o evitar serian, por ejemplo: la alimentación adecuada, el ejercicio y/o sedentarismo, el hábito tabáquico, control de la diabetes, la hipertensión, el perfil lipídico etc., es decir, tener presente la metáfora de que el mejor tratamiento para una enfermedad, en este caso, las cardiacas son “no enfermarse”.
8 - ¿Cuál es la incidencia de enfermedades cardiovasculares en Venezuela?
AB: No es mayormente diferente en forma proporcional a las estadísticas señaladas por la OMS: 17.9 millones de muertes anuales o 32% de todas las ocurridas en ese periodo. 1 de cada muerte en mujeres, se estima que cada 20 minutos pudiese fallecer una persona como consecuencia de un evento cardiovascular.
9 - ¿Un consejo a las nuevas generaciones de cardiólogos o jóvenes que quieran formarse en esta área?
AB: Prepararse intelectual y físicamente para iniciar una nueva forma de vida, intensa, delicada, interesante, mediante un proceso de preparación intelectual y práctico, que les de la satisfacción no solo de cumplir con el deber, sino de disfrutar de ayudar al prójimo y al país.
Por: Karla Guzmán
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