El Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) de Estados Unidos recomienda a los conductores extranjeros tramitar un Permiso de Conducir Internacional (IDP).
Este documento, reconocido en más de 150 países, funciona como una traducción oficial de la licencia de conducir original y debe gestionarse en el país de residencia del solicitante, según reseña Mundo Deportivo.
¿QUÉ ES EL IDP?
El IDP es una forma de identificación reconocida en muchos países, permitiendo a los titulares conducir legalmente en naciones distintas a la suya. Sin embargo, no todos los estados de Estados Unidos requieren este permiso.
Los extranjeros que residen permanentemente en Estados Unidos pueden solicitar una licencia de conducir del estado donde viven. Cada estado establece sus propios requisitos para determinar la residencia y la elegibilidad para obtener una licencia.
Asimismo, existen requisitos de identificación que deben cumplirse y la licencia estatal permite conducir en cualquier parte del país.
No contar con el IDP puede resultar en sanciones severas, incluidas multas, retención del vehículo y citaciones judiciales.
Las aseguradoras también pueden negar cobertura en caso de accidentes si no se presenta la documentación requerida, lo que podría generar costos legales y financieros significativos.
Tener el IDP no solo permite manejar legalmente en Estados Unidos, sino que también facilita la renta de autos y proporciona protección ante posibles sanciones.
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