La mejor manera de retirar el maquillaje a prueba de agua es utilizando productos específicos que disuelvan los componentes resistentes al agua sin dañar la piel. Estos maquillajes están diseñados para durar más tiempo y resistir el sudor, la humedad y el roce, por lo que requieren una rutina de limpieza efectiva pero delicada.
Paso 1: escoge el desmaquillante adecuado
Para retirar el maquillaje a prueba de agua, lo más recomendable es utilizar un desmaquillante bifásico o un aceite limpiador. Estos productos contienen ingredientes que disuelven el maquillaje de manera eficiente sin necesidad de frotar en exceso. Los desmaquillantes a base de aceite, como el aceite de coco o el de almendras, también son una excelente opción, ya que disuelven los pigmentos y la cera del maquillaje sin irritar la piel.
Paso 2: aplica el desmaquillante correctamente
Humedece un algodón o una almohadilla reutilizable con el desmaquillante y colócalo sobre los ojos cerrados o los labios durante unos segundos. Esto permite que el producto actúe y disuelva el maquillaje sin necesidad de frotar. Luego, desliza suavemente el algodón hacia abajo y hacia afuera. Para el rostro, aplica el aceite limpiador con movimientos circulares para eliminar cualquier residuo de base o corrector.
Paso 3: doble limpieza
Después de retirar el maquillaje, es recomendable realizar una segunda limpieza con un gel o espuma suave para eliminar los restos de aceite y cualquier impureza. Esto asegura que la piel quede completamente limpia y libre de residuos.
Paso 4: hidratación y cuidado posterior
Después de limpiar la piel, aplica un tónico suave y una crema hidratante para restaurar la barrera cutánea. Si usaste maquillaje en los ojos, un contorno de ojos con propiedades hidratantes y calmantes ayudará a mantener la piel delicada en buen estado.
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