En el contexto del aumento de operaciones de control migratorio en Estados Unidos, los inmigrantes con tarjeta de residencia permanente, o Green Card, cuentan con un documento que les protege de deportaciones. Sin embargo, es crucial que lleven siempre la tarjeta consigo para evitar multas.
Los agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) intensificaron sus esfuerzos para detener inmigrantes, una medida de la administración de Donald Trump.
Aunque los portadores de la Green Card están protegidos, no tener el documento consigo puede acarrear sanciones, reseña El Tiempo en su web.
Según la Ley de Inmigración y Nacionalidad, no presentar la identificación cuando se le solicita es un delito menor, con multas que oscilan entre $100 y 30 días de prisión.
La aplicación de esta multa no es obligatoria, pero los funcionarios de inmigración pueden imponerla a su discreción. En este escenario de estrictas leyes migratorias, es recomendable que los inmigrantes siempre porten su tarjeta para evitar malentendidos y posibles procesos de inmigración.
También se sugiere hacer una copia de la Green Card como respaldo en caso de pérdida o robo.
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